Víctor Manuel Fernández, Ángel Sixto Rossi, Vicente Bokalic Iglic y Mario Aurelio Poli son los cuatro cardenales argentinos con derecho a voto en el cónclave que elegirá al sucesor del papa Francisco, fallecido el lunes a los 88 años.
En el caso de Mario Poli hay que señalar que fue obispo en la provincia de La Pampa durante algunos años. El 24 de junio de 2008, el papa Benedicto XVI lo nombró obispo de Santa Rosa. Tomó posesión canónica el día 30 de agosto del mismo año, durante una ceremonia en la Catedral de Santa Rosa y permaneció hasta el 2013 cuando pasó a ser arzopispo de Buenos Aires, reemplazando justamente a Jorge Bergoglio cuando se convirtió en Papa Francisco. El 28 de marzo de 2013, el papa Francisco lo nombró arzobispo de Buenos Aires y Primado de la Argentina. Tomó posesión canónica el día 20 de abril del mismo año, durante una ceremonia frente a la Catedral de Buenos Aires.
Tras la activación del protocolo de Sede Vacante, la Iglesia se prepara para definir al nuevo pontífice entre los 138 cardenales menores de 80 años que integran el Colegio Cardenalicio. El cónclave se realizará entre 15 y 20 días después del fallecimiento de Francisco.
Los otros cuatro cardenales argentinos no participarán del cónclave por superar los 80 años: Leonardo Sandri (81), Luis Héctor Villalba (90), Luis Pastor Dri (97) y Estanislao Esteban Karlic (99).
El nuevo pontífice será designado por al menos dos tercios de los votos. La mayoría de los electores fueron nombrados por el propio Francisco, lo que sugiere que muchos de ellos comparten su visión reformista.
El papa Francisco nombró 110 cardenales durante su pontificado, cifra que influirá en la orientación del futuro liderazgo de la Iglesia.